Por fin llegó el iPhone 4 a España el teléfono de Apple. Ya va por la cuarta versión y se diferencia de la anterior (la 3GS) porque tiene una conexión a Internet más rápida (tanto por wifi como por red móvil), un procesador más rápido a 1GHz, y 2 cámaras (una de ellas graba vídeo en HD de 720 líneas). Se puede decir que el iPhone 4 se acerca a los modelos de la competencia.
Pero han metido la pata con la antena, porque es externa y al tocarla con los dedos pierde la cobertura. Apple durante un tiempo intentó convencer a los clientes para que se comprasen una funda que dicen soluciona el problema pero cuesta 35€, ahora la regalan (promoción válida hasta septiembre) pero no deja de ser curioso que en un teléfono que cuesta más de 600€ falle en el componente más importante.
Aún así hoy ha salido a la venta en España y, aún conociendo el fallo de la antena, hay quienes han hecho largas colas para comprarlo. Para mí se trata de un caso de Experiente X porque hay muchos otros modelos de teléfonos que superan las funciones del iPhone, no tienen fallos de diseño, incluyen accesorios (manos libres, fundas, cargador para red eléctrica), y además son más baratos. Pero la gente prefiere el iPhone ¿que tendrá ese teléfono que tiene clientes tan fieles?
¡Nada!, yo prefiero los móviles más funcionales. Cualquiera que lleve Android me vale. Ahora mismo hay modelos muy bien de precio y que igualan las funciones del iPhone, y además puedo instalar programas para llamar gratis (Skype) y GPS gratis (Google Maps Navigation), eso es difícil de encontrar en los productos de Apple porque tienen una Appstore donde dan prioridad al software de pago y en lugar de GPS gratis tendrás que comprar el software de tomtom. Es solo un ejemplo.
Y es que en España, donde los medios hablan cada día de crisis y mucho paro, el iPhone de 600€ es solo para la persona que se puede permitir hacer cola durante horas y tiene dinero de sobras para gastar y quiere demostrarlo: eso son los pijos, el iPhone es un fenómeno para los pijos.
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